jueves, 19 de marzo de 2009

A MIS PADRES

PARA VOSOTROS DE VUESTROS HIJOS Y NIETOS

A mis 40 años, cuando comienzo a vivir eso que ahora llaman “MADUREZ”, cuando empieza uno a saber lo que es tener hijos y lo que es comprender sin entender, lo que es callar y escuchar, lo que es dejar de tener tu razón para dar esa razón a quien, por cariño, entiendes que tiene la suya y que tiene el mismo o más valor que la que hace poco tiempo era la autentica y verdadera, la tuya, ahora, cuando uno como hijo siente el deseo de agradecer a quienes hace años pasaron por esta misma circunstancia y supieron no solo vivirla, sino hacerlo de forma tan humilde que con su  sacrificio fueron capaces de sacar adelante a cinco hijos con el único sueldo de la comprensión y el cariño, ahora, creo que ha llegado el momento para deciros lo que siento.
Desde que nací fui un niño complicado, complicado por débil, de hecho ni los médicos me daban más de seis meses de vida. Mumá se empeñó en que su niño viviese más de lo que los expertos pronosticaban, y lo de que se empeñó no es solo una forma de hablar, no, se empeñó en todos los sentidos, mientras el “analfabeto” de mi padre se partía el lomo trabajando como marinero en Sanlucar faenando en los barcos de arrastre que navegaban por Marruecos (con apresamiento incluido) , aprovechaba, entre las bromas de sus compañeros, para estudiar mecánica, mi madre mientras tanto luchaba por conseguir los caros medicamentos que mi pobre cuerpo de bebé necesitaba para vivir algo más de tiempo.
Mientras tú luchabas y mi madre luchaba, yo en mi inconsciencia de niño solo estaba.
A los pocos meses de yo llegar a esta vida (10) , llegó mi hermano Manolo, al nacer con tan solo siete meses de gestación, era tan pequeño que llevó el mote de ratón casi hasta el día de su primera comunión. Por aquel entonces tú andabas de emigrante por Holanda.
Al tiempo sintiendo la lejanía de tu familia, volvistes a tu pueblo y te enrolastes otra vez en varios pesqueros de Cádiz, a pesar de tu claustrofobia.
Nació mi hermana MARI, tú seguías en el mar y mumá en Sanlucar . Empezabas a estar cansado de los días que pasabas fuera de casa, lejos de mi madre y de tus hijos.
En 1974 decidistes cambiar dinero por tiempo e ingresastes en la guardia civil, el sueldo no era comparable con el que ganabas en la mar, pero pensastes que así estarías más tiempo en casa con tu familia, un error.
Nada más llegar a tu primer destino, pasastes tres días en un bosque de Soller apagando un fuego y mientras, mumá con tres niños agarrados de su mano, buscando donde dormir esa noche.
Mi madre demostró esos días lo que es capaz de hacer una madre por sus hijos. Mientras que otras se hubiesen derrumbado, ella en cambio se las arregló sin conocer a nadie y sin entender ese idioma que hablaban en aquel pueblo para que nosotros no notásemos el cambio que se iba a producir en nuestras vidas, se “adaptó” de tal forma que consiguió que llegásemos a creer que siempre habíamos vivido allí.
Mi recuerdo de entonces son los apagones continuos de electricidad y las historias a la luz de un candil de petróleo que nos contabais de vuestra niñez.
Volvimos a Cádiz en 1978, un mes antes de yo cumplir 10 años
Mis recuerdos de entonces son que no se veía el UHF en la tele, a ti vendiéndonos que la televisión en color consistía en poner el papel rojo de envolver el queso de bola en la pantalla, obreros de la BAZAN corriendo por las calles e ir a la librería FRANCIA a comprar los domingos aquel Diario de Cádiz con el que envolver EL PAIS, porque como decías” Tened cuidado que no se os vea”, porque por aquel entonces, aún estaba mal visto que un Guardia Civil leyera la prensa “progresista”.
Mientras tanto mumá seguía haciendo “encaje de bolillos” para llegar a fin de mes y que a nosotros como ella decía no nos faltase de ná.
Si la niñez de Machado es el recuerdo de un patio de Sevilla, la nuestra es el recuerdo de unos padres que con el ejemplo de sus vidas nos inculcaron a sus hijos y ahora a sus nietos que la vida es un regalo y que no hay sacrificio inútil.
Hoy todos nosotros MANOLO, MARI, MIGUEL ANGEL , ROCIO y ANTONIO, somos orgullosos, porque tenemos el orgullo de teneros a vosotros como padres.

PAPA MAMA
GRACIAS POR CONSEGUIR QUE NUESTRAS VIDAS SEAN PLENAS
UN BESO DE TUS HIJOS.

3 comentarios:

  1. Y vuestra nuera os manda tambien muchos besitoss!!!
    para mi sois los mejores suegros que se puede tener, aunque la verdad, más que suegros, sois como mis segundos padres ^^

    Os quiero mucho!!

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  2. Si señor, desde Benidorm, el resto de la familia, que os quiere, y recuerda.

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